Un "Don Nadie" llamado Julio César dice que hacía "lo mismo que Messi" en Italia

En la previa del amistoso entre el Inter Miami de Lionel Messi y el Olimpia de Honduras, las gradas estaban repletas de aficionados ansiosos por ver en acción al astro argentino. Entre ellos, un invitado especial decidió robarse un poco de protagonismo con declaraciones que podrían haber salido directamente de un guion de ciencia ficción: el exfutbolista hondureño Julio César de León, más conocido como “Rambo”.
Fiel a su estilo sin filtro, "Rambo de la gente" soltó una perla digna de enmarcar:
“Yo prácticamente hacía lo mismo. Lo mismo que hace Messi lo hacía yo en Italia”
Sí, lo has leído bien. Rambo, el hombre que dejó su huella en equipos como el Reggina y el Génova, se ha puesto a la altura de Messi, el mismo que ha ganado 8 Balones de Oro, 4 Champions League, un Mundial y que ha pulverizado casi todos los récords habidos y por haber. La afirmación tiene el mismo sentido que decir que alguien que jugó en el patio del colegio al lado de un poste de luz es comparable con Pelé en Maracaná.
La Serie A de los 2000: El Verdadero Reto
Por si fuera poco, Rambo no solo se comparó con Messi, sino que argumentó que la Serie A en su época era "más aguerrida", lo que indirectamente deja entrever que, en su universo paralelo, él enfrentaba desafíos más duros que los del propio Leo.
"Aún así yo me divertía jugando contra Andrea Pirlo, Fernando Redondo, Rui Costa, Luis Figo, Edgar Davids, Alessandro Del Piero, Esteban Cambiasso..."
No hay dudas de que la Serie A de aquellos años era un fútbol de élite, pero de ahí a insinuar que él también era de ese calibre... Bueno, habrá que preguntarle a Pirlo si alguna vez sufrió una "masterclass" de Rambo de León.
Messi, Mientras Tanto, Sigue Siendo Messi
Mientras Rambo hacía sus declaraciones, Messi se encargaba de recordar quién es realmente el mejor. En 63 minutos, el argentino marcó un gol, repartió dos asistencias y demostró que hasta en un partido amistoso en Honduras sigue jugando en otra galaxia.
Al final, el Inter Miami ganó 5-0, pero más allá del resultado, lo más impactante de la noche no fue el rendimiento de Messi, sino la convicción con la que Rambo de León se comparó con él. En otro universo, quizá. En este, la diferencia entre Messi y Rambo es de unos 800 goles, 40 títulos y una legión de seguidores que no necesitan autoengaños para alimentar su legado.