Ni Radrizzani ni venta del Valencia CF: Este es el singapurense que se va a quedar el equipo
A pesar de un comienzo tumultuoso en la temporada, con tan solo 7 puntos de 33 posibles y un ambiente caótico en Mestalla, Peter Lim, el máximo accionista del Valencia CF, mantiene firme su postura de control sobre el club. Frente a un creciente descontento entre los aficionados valencianos, que claman por un cambio en la gestión, Lim parece tener otros planes que incluyen un legado familiar muy definido.
En un intento por tranquilizar a los seguidores y críticos, Kiat Lim, hijo de Peter Lim y también consejero del club, ha salido al paso de las críticas a través de un mensaje en su cuenta de Instagram. En este, ha reiterado el compromiso de su familia con el Valencia CF, asegurando que su proyecto es de "largo plazo" y solicitando el apoyo continuo de los aficionados para superar los desafíos actuales.
El joven Lim reconoció las dificultades deportivas que enfrenta el equipo, actualmente en la última posición de la Primera División, pero mostró un optimismo cauteloso sobre el futuro. "La temporada aún es larga", afirmó, expresando su confianza en que el equipo puede revertir su suerte y comenzar a acumular victorias.
Desde su llegada en mayo de 2022 para la final de la Copa del Rey, Kiat ha sido visto como una figura central en el futuro del club. Sin embargo, sus apariciones en València han sido esporádicas desde entonces, y no ha regresado a la ciudad desde la junta de accionistas del 2022. Este alejamiento físico ha generado especulaciones sobre su involucramiento y el de su familia en el día a día del club.
El modelo de gestión de Meriton Holdings, la empresa de Lim, ha sido frecuentemente criticado por desinvertir en el equipo mientras se vendían jugadores clave, una estrategia que muchos consideran responsable de la precaria situación deportiva del club. A pesar de esto, en tres de las diez temporadas bajo la gestión de Meriton, el club ha reportado números positivos.
Mientras tanto, la comunidad valencianista observa y espera, preguntándose si la promesa de un proyecto a largo plazo con Kiat Lim al frente será suficiente para devolver al Valencia CF a sus días de gloria. Con cada partido que pasa, la presión aumenta, no solo sobre los jugadores y el cuerpo técnico, sino también sobre los propietarios, que ahora parecen más decididos a reanudar su conexión con el equipo y sus seguidores.
¿Será suficiente este cambio de enfoque para calmar las aguas en Mestalla? Solo el tiempo y los resultados futuros lo dirán, pero una cosa es segura: la gestión de Lim y el futuro de Valencia están más entrelazados que nunca, con un legado familiar que parece destinado a continuar en manos de su hijo, Kiat Lim.
