El campeón de Fórmula 1 tiene claro que el "mejor de la parrilla" en motos es español
Max Verstappen, el tetracampeón del mundo de Fórmula 1, ha confesado su "amor" por MotoGP y su deseo de pilotar una moto de competición. En una charla con Marc Márquez durante la gala Hangar-7 de Salzburgo, Verstappen admitió que "sería sensato empezar con una Moto2 o Moto3" antes de "subirse a una MotoGP".
"Soy un gran fan de MotoGP":
Verstappen reveló que sigue "con atención" el Mundial de MotoGP, incluso durante los fines de semana de carreras de Fórmula 1. "Soy un gran fan de MotoGP y trato de ver cada carrera. Incluso llevo mi iPad a los circuitos para no perderme nada", confesó.
Intercambio de "monturas" entre Hamilton y Rossi:
El piloto neerlandés recordó el "icónico" intercambio de "monturas" entre Lewis Hamilton y Valentino Rossi en Valencia, donde el piloto de Fórmula 1 pilotó la Yamaha de "Il Dottore" y el italiano se subió al Mercedes.
"Entiendo las preocupaciones de mi equipo":
Verstappen reconoce que "le encantaría probar una MotoGP", pero entiende las "limitaciones" que imponen los equipos de Fórmula 1 a sus pilotos para evitar "actividades de alto riesgo". "Me encantaría hacerlo, pero entiendo las preocupaciones de mi equipo. Por ahora, me conformaré con disfrutarlo como espectador", añadió.
Márquez, "el mejor de la parrilla":
Verstappen también elogió a Marc Márquez, afirmando que "es el mejor de la parrilla" y que "volverá a luchar por el Mundial". "Marc es un seis veces campeón de MotoGP, y aunque necesitará algo de tiempo para adaptarse a su nuevo equipo, estoy seguro de que lo hará muy bien", aseguró.
Márquez "analiza" la Fórmula 1:
Por su parte, Márquez destacó la "impresionante" habilidad de los pilotos de Fórmula 1 y comparó ambas disciplinas: "Como aficionado al motor, sigo la Fórmula 1 con detalle. Las trazadas y los puntos de frenado son impresionantes. Aunque, en MotoGP, el piloto puede influir un poco más con el cuerpo, lo que lo hace más sencillo en comparación".
El "sueño" de Verstappen de pilotar una MotoGP refleja la admiración mutua entre los "gigantes" del motor. Aunque por el momento tendrá que "conformarse" con ser espectador, la posibilidad de verlo sobre una moto de competición en el futuro sigue abierta.